Llevamos varios años haciendo hincapié en las bondades del uso de las bacterias fijadoras de nitrógeno en nuestros cultivos.

Desde el primer año que las probamos hemos visto su buen efecto, y en los ensayos que hemos realizado se ha visto una mejora en la producción respecto a la zona abonada solo con fertilizante nitrogenado.

Como estimación hay que calcular que este tipo de productos a la dosis recomendada aportan entre 27-30 unidades de nitrógeno como mínimo. Esto equivaldría aproximadamente a 100 kg del conocido nitrato amónico del 27.

Estos últimos años, eran muy demandadas por el agricultor debido a los altos precio de los fertilizantes nitrogenados. Este año la situación ha cambiado, afortunadamente los precios de los nitrogenados han bajado y estaríamos hablando de un precio similar entre la aplicación de las bacterias y el abonado con 100 kg de un Nac.

Pero continúan siendo una buena opción por:

• Facilidad de aplicación, se puede hacer con la cuba herbicida.
• Se pueden mezclar con la mayoría de fitosanitarios que se aplican en el cereal en estos momentos, ahorrándonos un pase. Con los que hay que tener más cuidado es en mezcla con fungicidas, que suelen llevar algunos aditivos a base de cobre que anulan a la bacteria.
• Menor riesgo de asurado si aportamos estos productos a nuestros cultivos y luego se produce un periodo de sequía y calor. El asurado de los cereales se produce por temperaturas elevadas que se une a la sequía, y esto hace que la planta no pueda suministrar por las raíces la humedad que el cultivo pierde por las hojas, provocando un desecamiento rápido.
• En zonas vulnerables donde tenemos restringido el aporte de unidades de nitrógeno, estos productos se convierten en vitales si queremos conseguir altas producciones. En nuestros regadíos, la limitación se encuentra en 150 unidades de nitrógeno, que son escasas para poder llevar la producción y la rentabilidad a cotas altas. Y en secano, también la limitación de 105 unidades de nitrógeno se antoja escasa si queremos sacar el máximo potencial a nuestro cultivo.

Los ensayos realizados el año pasado dieron como resultado un incremento medio de cosecha de un 16 % en cultivo de cereal.

Estos productos a base de bacterias fijadoras de nitrógeno no solo se pueden usar en cereal, sino que también son muy efectivos en maíz, cuya demanda de nitrógeno es muy alta, así como en girasol, viña, algodón, cítricos, etc.

Nosotros recomendamos productos que ya hemos probado y sabemos de su eficacia, como son:

• Blue N
• Nutribio N

Existen ahora mismo en el mercado muchos productos de ese tipo. Lo mejor para asegurarte una buena elección es consultar al técnico de tu cooperativa, que te va asesorar sobre cuál es la mejor solución para tu cultivo y qué producto es el más idóneo para ti, así como dosis y momento de aplicación.

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